Durante los meses de reposo invernal, una forma muy asequible de adquirir arbustos y árboles de hoja caduca —sobre todo rosales, frutales y setos— es como ejemplares a raíz desnuda. Esto significa que se presentan sin tiesto ni cepellón, la masa de tierra que habitualmente envuelve las raíces. Así pues, a la hora de plantarlos será necesario tener en cuenta una serie de detalles para asegurar una buena implantación. Aquí te contamos cómo proceder.
El precio de los árboles y arbustos que se adquieren a raíz desnuda es bastante más bajo que cuando se presentan en contenedor, un aspecto importante sobre todo cuando se trata de muchos ejemplares. A cambio, la plantación, si bien no es complicada, exige un mayor cuidado. Para empezar, algunos consejos: • No compres ejemplares con raíces orientadas hacia el mismo lado. Mientras más radial sea la distribución, mejor. • Planta lo antes posible tras la compra. Si es inevitable postergar la plantación, protege las raíces de la desecación metiéndolas en un hoyo o una zanja, cubiertas con sustrato húmedo. • No plantes si el terreno está congelado o saturado de agua. • Se puede plantar a raíz desnuda hasta finales de febrero, incluso cuando ya se ven brotes en las plantas. Antes de plantar 1 Retira el envoltorio, generalmente de plástico, que envuelve las raíces, e introdúcelas en un cubo con agua para hidratarlas, tal como se ve en la foto de la derecha. Si disuelves un poco tierra, mucho mejor, ya que conseguirás un baño de barro que al adherirse a las raíces favorecerá la implantación. Mantenlas sumergidas al menos durante una media hora. También puedes dejarlas en remojo toda la noche anterior, como recomienda el productor de rosas David Austin. 2 Excava un hoyo de unos 60 centímetros de profundidad (o dos veces la altura de una pala de jardín) y 40 centímetros de diámetro (debería triplicar el de las raíces). Con una horquilla rompe el fondo del hoyo. Elimina las malas hierbas, piedras y restos de plantaciones anteriores. Así, las raíces de la nueva planta podrán profundizar y desarrollarse sin impedimentos. Si vas a plantar en un tiesto procura que sea profundo y su diámetro triplique el de las raíces. Además, deberás añadir una capa de gravilla en el fondo del recipiente para asegurar el drenaje. El resto del procedimiento es el mismo. 3 Puedes usar sustrato de plantación, ideal para estas operaciones ya que incluso cuenta con hormonas de enraizamiento. También puedes emplear sustrato universal, para acidófilas si son plantas de estas características, o buena tierra de jardín. Añadir abono compostado en el fondo del hoyo de plantación será necesario o no según las exigencias de la especie. Está recomendado en el caso de los rosales, por ejemplo. Siempre se debería tener en cuenta las indicaciones al respecto del viverista o consultar en el centro de jardinería. La plantación paso a paso Ha llegado el momento de la plantación. En las fotos, de un rosal arbustivo, según las recomendaciones del rosalista David Austin. 4 Extrae el rosal del cubo de agua y espolvorea las raíces con micorrizas. Hazlo sobre el hoyo, como en la foto de la derecha. 5 Comprueba la altura de plantación colocando una varilla sobre el hoyo (fíjate en la foto de la derecha). Deberás quitar o añadir tierra hasta asegurarte de que el punto donde surgen las raíces queda por debajo del nivel del suelo. En el caso de las plantas injertadas, el punto del injerto, es decir, la zona protuberante que se observa entre las raíces y el tronco, debe quedar justo debajo de la varilla, y en las zonas frías, incluso a 5-7 centímetros de profundidad, especialmente si se trata de rosales. 6 Centra el ejemplar y extiende bien las raíces (foto de arriba). Cúbrelas con el sustrato, procurando que la planta se mantenga recta y firme. Si se trata de un rosal trepador, los tallos deben apuntar hacia la pared y las raíces separarse de ella, en un ángulo de 45 grados. 7 Apisona ligeramente con el pie para que la tierra se adhiera a las raíces y desaparezcan las bolsas de aire (foto de la derecha). 8 Riega suave y generosamente con una regadera. Puedes acolchar el hoyo y el alcorque con una capa de mulching para abrigar las raíces del frío (y el calor en su momento) y conservar la humedad. La importancia de entutorar Los árboles a raíz desnuda se presentan sin entutorar, de modo que deberás colocarles una estaca para impedir que se muevan, un aspecto clave en este tipo de plantación. El entutorado se puede hacer de varias maneras: con una estaca colocada con una inclinación de 45 grados (como en la foto), de forma que el extremo que va enterrado no toque las raíces; con tres o cuatro estacas clavadas en el contorno del hoyo, o con una única estaca paralela al tronco (si este es el caso, debes introducirla cuidadosamente entre las raíces, sin lastimarlas, en el momento de colocar el ejemplar en el hoyo y antes de rellenar con el sustrato). Ata el ejemplar a la o las estacas mediante tiras de goma sin ajustar demasiado. Abono compostado para los rosales A la hora de plantar rosales a raíz desnuda se aconseja mezclar el sustrato del fondo del hoyo con el contenido de una pala pequeña de abono orgánico bien compostado, preferentemente estiércol de herbívoros. De ese modo se aportará un extra de nutrientes al suelo que ayudará a estas plantas a establecerse. Fuente: verdeesvida.es